De los más de 60 heridos que dejó la explosión del jueves por la noche en Alta Córdoba, hay tres personas que permanecen internadas.
Se trata de Pablo Amaya (15 años), quien se encuentra en el Hospital de Urgencias, y de María Angelina Cueto (64). Ambos permanecen en estado reservado.
De acuerdo a la información del Ministerio de Salud de la Provincia, las lesiones que han sufrido son severas, por lo que hay que esperar su evolución de las próximas horas.
Una mujer y un joven están en terapia intensiva con pronóstico reservado. Un bombero permanece en el Policlínico Policial con heridas cortantes.
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