Política Muerte y estupor; pruebas y enigmas de la investigación El fiscal había regresado al país el lunes 12 de enero y dos días después denunció a la Presidenta y al Canciller de gestar un plan para encubrir el atentado a la Amia. El domingo por la noche, su madre lo halló muerto, con un disparo en la cabeza. El hecho sacudió al país y generó una crisis institucional con derivaciones difíciles de dimensionar. El Gobierno abrazó, al principio, la teoría del suicidio, pero sobre la marcha cambió drásticamente: Cristina Kirchner piensa desde el jueves que a Nisman lo mataron como parte de un complot para perjudicarla.
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