lunes, 20 de octubre de 2014

Los santos vienen marchando

Iglesia Santa Catalina, entre cuyos antiguos muros descansan los restos de la religiosa Leonor Ocampo.
La Catedral recuerda a José Gabriel Brochero, el Cura Gaucho.
Marta Álvarez Moncada (Especial)

Serios, pensativos, severos o humildes, con suaves sonrisas de quienes comprenden y perdonan, o de adustos semblantes que retan a obedecer los mandatos de la iglesia observan desde altares y estampas. Sin embargo, una mirada a la historia demuestra que por esta ciudad también hubo santos. 

Córdoba en su historia recupera a santos locales, algunos venerados, unos pocos recordados por algún reducido grupo de fieles y   otros que pasaron al olvido. Vidas de entrega, en tiempos en que la ciudad recién despuntaba al progreso.



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