Pero, además, en las filas opositoras hubo ausencias notorias que colaboraron a que la diferencia entre los votos positivos y los negativos se estirase. Entre ellos, la macrista Laura Alonso, la jefa del GEN Margarita Stolbizer o la radical cordobesa Patricia De Ferrari.
Los diputados K lograron la misión encomendada por la Casa Rosada y aprobaron, sin inconvenientes –tal como se preveía– la ley de pago local de la deuda externa.
Fue entre gallos y medianoche, como pasa con todas las votaciones urticantes y sobre temas polémicos, pero el Frente para la Victoria mantuvo a su tropa firme y hasta le “robó” votos a los bloques opositores.
Si el kirchnerismo demostró estar ordenado y evitó fugas, la oposición hizo lo contrario.
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