“Siento que he vuelto a nacer después de pasar por el infierno y no veo las horas de llegar a mi casa para abrazar a mis hijos. Los extraño un montón”.
Eso fue lo primero que le confió a La Voz, José Tissera (31) el hombre que salvó de manera providencial su vida en la trágica explosión del gasoducto en Pilar, momentos antes de ser dado de alta del Instituto del Quemado de Córdoba.
José Tissera sufrió graves quemaduras en Pilar, por la explosión del gasoducto. Hoy fue dado de alta y habló con La Voz.
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